Crianza en huevos de cemento y barricas nuevas de roble francés de 500 l., durante 8 meses, sobre sus lías finas aplicando la técnica del bâttonage.
El resultado es un vino muy maduro por su contacto con el roble, capaz de transmitir la potencialidad del godello, tanto en boca, como en nariz.Sale al mercado cuando se da una compleja combinación de factores naturales y ambientales, que derivan en una cosecha con la mejor uva de la mejor viña para su producción